Vlad Steven: Rudos vs Técnicos

22 mayo 2007

Rudos vs Técnicos

Esta fue la Expo-Lucha 2007, donde se presentaron las nuevas generaciones de luchadores (la generación de los Junior's), quienes al cobijo de la leyenda que sus padres construlleron hace ya algunos años, están luchando por resurgir y rescatar un ambiente, un estilo cultural muy mexicano, retro y quitch sobre el deporte de la lucha libre.

Estos son los nuevos ídolos y héroes mexicanos, unos enmascarados o otros no, pero eso sí de carne y hueso. Con ellos se puede uno divertir y sorprender por el espectáculo que presentan.

La combinación de estilos y motivos prehispánicos con el tema de la lucha libre dan estas pinturas muy interesantes. Lo mexicano es chido; lo chido es neta y además rifa.

Este es Daniel Zaragoza, campeón de no se qué división ni de qué peso del boxeo mexicano, pero fue chido encontrarlo repartiendo autógrafos.

Aquí le puse unos zapes a este luchador. ¡¡¡Sí, como no!!!

Haaaaaa!!! Uno de los primeros luchadores que ví pelear y por su estilo se convirtió en uno de mis faboritos, él es Súper Muñeco (Izq.).

Esto es increíble!!! Si de rudeza se trataba, el Cabernario Galindo fue un ícono, una institución y una leyenda para el bando rudo. Por eso del título de "Rudo del Milenio".

Estas son las máscaras de los luchadores de mi preferencia y admiración. La más destacada de todas, claro después de la del Santo que no apareció en las vitrinas, es la del poderosicimo Dr. Wagner.

Estos son las fotos de los primeros "meros meros" de la lucha libre mexicana.

Este es trabajo de un artista plástico chiwuawense y por respeto a su obra solo se fotografió esta pintura. Pero su trabajo es imprecionante.

Juntando el culto a la muerte, el árte del trabajo en papel maché y la afición por la lucha libre, surgen ideas creativas como estas calacas luchadoras.

El luchador enmascarado es el Hijo de Dos Caras o Dos Caras Jr., el de la izquierda es el Hijo Desobediente.

El INAPAM (antes conocido como el INSEN), mandó a su representante a la Expo-Lucha, éste fue el Satánico, vestido de negro y unas flamas pintadas a los costados. Están de moda los reencuentros.