21 noviembre 2007

Disculpa pública y general.

Aprovecho este mi espacio virtual para manifestar y ofrecer una disculpa pública, amplia y extensa a tod@s y cada un@ de mis herman@s a quines por mi falta de sensibilidad, consideración y atención ofendí, agravié, insulté e ignoré al “tirarles plancha” en la salida de este fin de semana.

Lamento mucho no haber, siquiera, avisado (aunque sea de última hora), mi inasistencia a pesar de que un par de días antes solamente me “comentaron” sobre la salida, más nunca de su confirmación y de no haber llamado a quienes me puse en contacto la noche anterior para organizarme de manera personal y poder llevarles el equipo.

Sin embargo, haciendo caso omiso a la falta de coordinación en la logística de la invitación, confirmé a pesar de que uno de los dos objetivos originales y primordiales (escalar), no estaba total y completamente seguro.

Por otra parte -y también tomando en cuenta de que lo siguiente es delicado- no se tomó en consideración ni la atención por parte de todos y cada uno de los invitados a quienes si les llegó la invitación en enviar ni mucho menos reenviar los varios correos electrónicos que sobre la “organización”, “propuestas”, “confirmaciones” se realizaron; revisar en la barra de destinatarios si faltaba alguien y, por último, realizar un ejercicio de retroalimentación con quien emitió el primer mensaje para agregar a los que ahí faltamos.

Espero y que esta situación nos permita tener más en cuenta que somos seres humanos y que los herrores podemos cometerlos en cuelquier momento. No somos infalibles, pero sí perfectibles. Por lo que reitero mis disculpas y esperando que esta situación nos sirva para crecer como personas y seres pensantes y que pronto se les baje el pinche enojo cabron@s porque los quiero un chingo como para que estén del chongo con nosotros que ni supimos cómo estaba el chow y nunca se comunicaron con nosotros para las especificaciones básicas. Y no soy jarrito de Tlaquepaque, pero tampoco soy de peluche. ¿¿¿Peluche??? ¡¡¡Peeeeeeeeelllluuuuuuuuuuuuuucheeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!!

Esperando que nos vuelvan a tomar en cuenta para la siguiente salida o plan y así podamos disolver las piedras (no las del riñón porque van para largo), de esta situación con unas bebidas coquetas, aguas locas, chelas de a kilo o lo que se les antoje, les mando hartos saludos.

Att
Yo merito mero.

PD Pongan más atención en cómo envían los mensajes masivos y no ignoren a "los de sangre".

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