Ahí nomás tras lomita. Se ve Dolores Hidalgo

Dolores Hidalgo, cuna de la independencia de México y de José Alfredo Jiménez quien puso letra a los dolores del corazón y a las conductas de machin. Pero antes de llegar, alguien pasó a Oaxaca.

Debo reconcer que mi instinto chilango de sobrevivencia está perfectamente desarrollado y al máximo. No había cruzado la calle cuando percibí el olor de esta suculenta, deliciosa y exquisita carroña de primera y excelente calidad. Y al grito de: ¡¡¡Atásquense puercos, ora que hay lodo!!! Le empacamos con singular alegría. Y claro, la ración de los ausentes la tuvimos que consumir.

Acá las güeras solo fueron por frutita. Ya las veremos en unos cuentos meses entrándole a la carroña del distro. Ann ya le entró a los de moronga. Buuuaaaaaaaaaa!!!!!

La Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores, sitio desde donde se avisó a la raza para buscar su libertad.

Me emocionó e impactó llegar a este lugar y estar frente al sitio donde Don Miguel Hidalgo convocó al pueblo a revelarse y buscar su libertad, principio fundamental para la existencia.

Otra en B/N a ver qué opiniones recibo de ustedes los que sí saben.

No termino de encontrarle la forma a este grabado que aparece en ambas puertas de la parroquia de Dolores Hidalgo. ¡Pero está interesante, no!

Huuuuy!!! Me acordé de mi libro de Historia de México de la Primaria y de que quería estar en ese lugar para concer la famosa cárcel de donde soltaron a los presos. Me dieron ganas de gritar: ¡¡¡Presos políticos libertad!!! Pero me hubieran dado unos cuantos "tese che chilango".

Parece que es verdad que la historia es cíclica, no está muy alejada esta imágen, representativa de los años 1810, a de 2007 (faltan tres años).

Y como Jahir llamó para apresurar la salida a San Miguel de Allende (la capital de todos los Migueles), no se pudo llegar a los otros sitios de interés histórico nacional. Ahí se las debo.